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¡BIENVENIDO AL SITIO DE LOS APANECAS (APANENSES)!

¿Te acuerdas de ...?

MUNICIONES DE PIEDRA IDEALES PARA RESORTERAS

MUNICIONES DE PIEDRA IDEALES PARA RESORTERAS

Este es un ¿te acuerdas de...? quizá muy personal, pero sé que algunos de mis lectores se identificarán conmigo.

Hace unos días, impulsado por el ánimo de mi sobrino, fuimos a recolectar algunos cuantos capulines por los árboles de “La Virgencita” que está rumbo a Chimalpa, pero no, si piensas que me voy a referir a esos recuerdos de niño cuando nos trepábamos en los árboles para juntar los capulines, no, sino que en el camino de regreso a casa, lo emprendimos por las vías del tren, y entre la platica amena de mi sobrino de 4 años, hallé algo que atrajo mi atención: Aquellas piedritas redondas que usábamos como municiones con nuestras resorteras.

Recuerdo que nos reuníamos e íbamos a las vías a juntar estas piedritas, y regresábamos con los bolsillos llenos hasta el tope de ellas, al grado que se nos caían prácticamente los pantalones, hallarlas era de lo más sencillo, pues había una gran cantidad de ellas, ahora ya no, mi sobrino mirando mi expresión de extrañeza, me reto a ver quien encontraba más de esas curiosas piedras, y ese fue nuestro juego durante todo el trayecto, solo hallamos cerca de 17, en aproximadamente 3 kilómetros , sé que muchos dirán que no es un tema que evoque los recuerdos de todos, pero si sé que de aquellos que solíamos hacer aquellas pequeñas travesías en busca de armamento para dispararle a botellas, nopales y pájaros, les hará lanzar un breve suspiro por aquellos bellos tiempos, los de nuestra infancia.
Pd: Al final mi sobrino me ganó jejeje, él halló 9 y yo solo 8, aunque al final se quedó con todas, yo solo quise fotografiarlas, cursi tal vez, pero necesitaba una foto para este artículo jejeje.



Redacción: Omar González


LOS MAGUEYALES

LOS MAGUEYALES

Muchos de nosotros no tuvimos la dicha de ver los campos que rodean a nuestra cuidad llena de magueyes, pero quienes tuvieron esa fortuna, cuentan con tristeza como fueron aquellos tiempos y como se han perdido, pues el maguey es un pilar en la construcción de nuestra historia, la calidad de su aguamiel, y el pulque que con él se producía dio tantas glorias a nuestro pueblo , sin embargo, se le ha desatendido gravemente al grado que hoy, tal producción ha caído a niveles tristemente muy bajos en comparación a aquellos tiempos, una persona en una entrevista me decía que a su vez, su madre le decía que “...Apan merecía tener sus calles de cristal por el dinero que se sacaba en la explotación del pulque”, hoy ello ya no existe, los magueyales desaparecieron, y verdaderamente debió de haber sido todo un agasajo contemplar aquellas tierras con sus hileras de magueyes, los cuales ahora nos encontramos a los costados de las carreteras como si hubieran sido olvidados allí por el tiempo.

Proyectos han surgido para reavivar la producción del pulque, sin embargo para que tales proyectos den fruto, se requiere de años de trabajo, pues la maduración y cuidado del maguey lleva mucho tiempo, ojalá algún día aquellos tiempos regresen, pues sería un enorme beneficio económico para estas tierras que –como en todo el país- buena falta hace, de cualquier forma es una pena que aquellos paisajes los guardemos ahora en imágenes únicamente y aquellos, que tuvieron la fortuna de vivir aquellos tiempos, la conserven en sus mentes como aferrándose a no olvidarlos.

Redacción y edición: Omar González
Foto: Juan Carlos Villordo

 

EL DESFILE DE LOS MUERTOS

EL DESFILE DE LOS MUERTOS

Cada año en temporada de Día de Muertos , una gran número de personas disfrazadas , se reunía al pie de las escaleras del panteón con el fin de desfilar por las calles céntricas de Apan repartiendo miedo y horror por doquier , la cantidad de personas creativamente disfrazadas era considerable, pues -al menos yo- recuerdo que la calle se llenaba de monstruos y muertos de lado a lado, por cierto muchos disfraces muy originales, todos causando verdadero miedo entre los habitantes de la ciudad, incluso –recuerdo- cuando se acercaban los muertos (a veces a bordo de camionetas), no faltaba el niño que a gritos avisaba que “ahí vienen los muertos” y todos salíamos a verlos y muchos más preferían esconderse, chicos y grandes.



Sin embargo año tras año esto se ha ido perdiendo, los niños –como siempre - siguen disfrazándose, muchos impulsados por los eventos organizados de sus escuelas o por el gusto de sus papás de verlos un día de manera terrorífica (y no precisamente por sus travesuras), pero cada vez menos adultos se disfrazan en estas fechas, aunque cabe hacer un apunte, al final del recorrido, los muertos llegaban al Auditorio Municipal para ingresar al tradicional baile de Día de Muertos , donde se premiaba al mejor disfraz, quizá ahí radique el porqué ya no vemos desfilar a los muertos por nuestras calles, era un momento de horror que todos disfrutábamos en demasía.

Redacción, edición y foto: Omar González

PEDIR CALAVERITA CON CALABAZAS ... ¡DE VERDAD!

PEDIR CALAVERITA CON CALABAZAS ... ¡DE VERDAD!

La única calabaza de verdad entre cientos de plástico

A muchos de nosotros nos toco hacer nuestras propias calabazas para salir a “pedir calaverita” en la temporada de Día de Muertos , me parece que si hoy les contáramos a los niños todo lo que hacíamos desde conseguir una calabaza apropiada, hasta ponerle su vela y su tapita con el rabo de la calabaza, sería equivalente a explicarles que existieron los discos negros de vinilo y que hoy se reducen a simples discos compactos (CD), pues de verdad que aquello si era todo un arte .

La tarea iniciaba con la búsqueda de una calabaza, ahuecarla por completo, perforar ojos, nariz y boca - por supuesto con sicodélicos gestos -, después hacer una pequeña perforación en la parte inferior donde se ajustaba una vela, ¡sí!, una vela que todo el tiempo debería de mantenerse encendida, y para evitar que se apagara, se hacía (desde un inicio) un corte en la parte superior de la calabaza donde se encontraba el rabo de la misma, que hacía la función de tapa, además, antes recibíamos monedas y de vez en vez algunos dulces, hoy los niños reciben en su gran mayoría dulces que monedas, aunque esto último no es relevante.

Para realizar este artículo de ¿Te acuerdas de ...?, salí con mi sobrino a pedir su calavera, e ingenuo de mí, pensé que encontraría a algunos niños con estas “ antiguas ” calabazas ( al decirlo me siento viejo) y podríamos fotografiarla, difícil sería mencionar alguna cifra de la cantidad de calabazas de plástico que encontramos por doquier, y de todas, sólo hallamos “UNA SOLA”, ... una calabaza de verdad entre cientos, quizá un millar; digna de un estante en un museo, pues parece que se han extinguido, ...si ya hemos hecho propia esta tradición Norteamericana de recibir dulces, al menos hagámoslo más artístico ¿no creen?.

Pd. Si no me crees esto, pregúntale a tus papás, seguro tendrán la misma impresión de nostalgia que muchos de los que nos tocó vivir aquellas épocas.

Redacción, edición y foto: Omar González

LOS MARES DE CEBADA

LOS MARES DE CEBADA

Nuestros mares de cebada, nuestros campos que parecían un mar amarillo verdoso, cuyo oleaje iba de un lado para el otro siguiendo el ritmo del viento, podías mirar todo tu derredor lleno de cebada y parecía casi infinito, los campos estaban inundados de él, doquiera que voltearas sólo veías cebada y maíz ; la cebada inclinándose por la fuerza del viento tomaba un matiz distinto, y así cada vez, haciendo un juego de colores que de verdad le daba el aspecto de oleaje de mar, hoy los distintos factores climatológicos y económicos han “secado” aquellos tiempos y recuerdos, en mi mente conservo cuando de niño tomábamos la cebada y la lanzábamos como pequeños cohetes, sintiendo en tu mano esa textura rasposa que aprovechándola, la podías depositar en las espaldas de alguien más provocándole comezón durante un buen rato, también eran perfectos proyectiles para “echar guerritas” pues si alguna quedaba prendida de tu ropa te debías declarar muerto o herido de gravedad (jejejeje), en fin, nuestros mares de cebada se han secado dejando un aspecto triste en nuestra región, ojalá algún día aquellos tiempos regresen y consigo la prosperidad de la labor campesina ... ojalá.

Redacción, edición e imagen: Omar González

EL SÁBADO DE GLORIA ADELANTADO POR LOS ESTUDIANTES DE LA SECU 1

EL SÁBADO DE GLORIA ADELANTADO POR LOS ESTUDIANTES DE LA SECU 1


Hace algunos años, se había convertido en una tradición el hecho de que los estudiantes de la Escuela Secundaria Federal # 1 “Miguel Hidalgo” –principalmente- se mojaran en la fuente del Jardín Municipal el último día de clases antes de las vacaciones de Semana Santa, esto con la intención de “adelantar” el tradicional baño del Sábado de Gloria, así que los alumnos y alumnas de esta institución, protagonizaban tremendo evento donde eran aventados dentro de la fuente, se les salpicaba a las personas que pasaban, y si alguno de los que por ahí cruzaban era reconocido por los jóvenes, era perseguido y empapado, algunos lograban emprender la graciosa huida antes de caer ante este castigo, pero muchos más no alcanzaban tal victoria y tenían que llegar a sus casas empapados (literalmente) “hasta las chanclas”, pues era por así decirlo un “Sábado de Gloria Estudiantil por Adelantado”, lo único que pretendían los jóvenes era divertirse en forma sana aunque no faltaba quien molesto por ser mojado empezara a generar el desorden, ya que esta fue una de las razones por las que en los siguientes años, se prohibió tal costumbre estudiantil, además del desperdicio de agua que esto generaba, ya que como todos sabemos, este vital líquido cada vez es más escaso y más difícil de llevar a los hogares, de esta forma el tradicional baño de los estudiantes se quedó en el pasado, pero se mantiene en nuestras mentes, al menos de aquellos que nos tocó vivir aquellos tiempos, algunos que fuimos empapados, otros aventados a la fuente o algunos más que logramos huir -y me cuento entre estos últimos-; si no tenías conocimiento de esto, pregúntale a tus padres o hermanos mayores, seguramente activarás un recuerdo de ellos que conservan con mucho entusiasmo... pregúntales y entérate de esas anécdotas, le harás regresarse a sus tiempos de estudiantes, uno de los mejores de nuestras vidas, la época de la Secundaria.

Redacción: Omar González

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EL JAGÜEY

EL JAGÜEY

Bueno, primero vamos a ponernos de acuerdo para entender a qué llamamos Jagüey, pues bien, jagüey es un pozo o zanja profunda llena de agua; puede ser creado artificialmente o en condiciones naturales por filtraciones del terreno, ahora bien, uno de estos jagüeyes se encuentra en la parte trasera del Cerro de San Pedro, aunque no es el único, pero si al que nos referiremos aquí... yo no sé ustedes, pero yo recuerdo que fue aquí donde inicie mis destrezas como pescador, y aunque a veces llegabamos de niños preparados con nuestras improvisadsa cañas de pescar y nuestras carnadas, rara vez lograbamos atrapar alguna carpa (La carpa es un pez omnívoro y por tanto su alimentación es muy variada, puede comer tanto alimentos vegetales como animales: gusanos (lombriz), moluscos (caracoles), larvas de insectos (asticot), pequeños crustáceos y también maíz, pan, patata cocida, higos, etc; le gustan las aguas tranquilas, ricas en vegetación y de fondo limoso), aunque he de confesar que pocas veces era gracias a las cañas de pescar, a veces terminabamos ralizando nuestra pesca con canastos o hasta pencas de maguey (hojas de gran tamaño del maguey), seguramente otros más recordarán que en ese lugar, a la sombra de algún árbol descansaban o algunos otros acompañados pasaban mejores momentos, sin duda, este jagüey es un lugar también digno de recordar, pues muchos y buenos momentos nos ha regalado, sin embargo, es un lugar que (como todos) debemos cuidar, pues en ocasiones sus aguas están llenas de basura, así que desde aquí la invitación a todos los que visiten el jagüey que está detrás del Cerro de San Pedro, por favor, ése y todos los lugares que visiten debemos mantenerlos limpios.

Redacción y edición Omar González

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